Proyección internacional

PORK presentó su primer disco, ”Multiple choice”, el pasado jueves en La Trastienda, ante una muy buena concurrencia. Interpretaron las doce canciones del álbum, más algunos covers que vienen tocando desde sus inicios. Sonaron de manera fantástica y sus fans disfrutaron a full de este concierto.



Causalidades buscadas

Más allá de que venían tocando con éxito por zona sur desde 2003, su punto de inflexión fue cuando estuvieron de soportes de FEAR FACTORY, en agosto de 2006. Allí, ANDRÉS GIMÉNEZ (actual voz y guitarra de D-MENTE) cantó con ellos ”Paranoid”, de BLACK SABBATH. Su amigo y productor ALEJANDRO TARANTO lo acompañó para aquel set y quedó conmovido con la actuación de la banda. A partir de allí, el crecimiento del grupo fue muy importante.

Variedad

Pasadas las 21:30 hs. comenzó a sonar una introducción bastante extraña para bandas del estilo; un sonido barroco-sinfónico que se asemeja más a grupos de heavy que a los de metal alternativo. Luego de ello, se corrió el telón y los primeros machaques de ”Why you?” retumbaron en el reducto de San Telmo.
”Buenas noches, esto es PORK”, fueron las palabras de CESAR BAR-RABIA (cantante) para recibir a su gente, sobre las guitarras de ”Multiple choice” en proceso. El público, que copó La Trastienda, estuvo enérgico en todo momento. Cantaron, saltaron o aplaudieron cuando la banda lo requería o el tema les exigía tal entusiasmo.

Además de CESAR, lo acompañan en la banda su hermano mellizo GASTON (guitarra), MARIANO CONDE (guitarra), PABLO TORRES (batería) y DAVID ORTIZ (bajo). Al mejor estilo MEGADETH, la gente coreó los acordes iniciales de ”The wake” con el grito de ”Aguante PORK”.

De movida, un audio contundente y furioso penetró en nuestros oídos. Realmente sonaron impecables desde todo punto de vista. Los cambios de clima son una constante en cada una de sus canciones. Pueden pasar de un trash a un grunge, o de un ñu metal a algo ambiental de forma natural. Pasaron ”Bloody Mary” y ”Jhonny on the spot”, entre otras.


Con razón...

PORK, en sus comienzos, realizaban muchos temas de otros durante sus recitales. En este show tan especial les costó elegir su primer cover de la noche, aunque finalmente la versión de ”Englishman in New York”, de STING, que ellos adaptaron como ”Latinman in New York”, fue la seleccionada.

Los mellizos BAR-RABIA vivieron hasta los quince años en Maryland, EE.UU.; es por eso que la banda eligió cantar en inglés. Se sienten cómodos de esa manera y la pronunciación de CESAR lo ratifica. Vocalizar en ese idioma le es algo normal y no forzado, como sucede con otras bandas argentinas.

Por momentos se pueden escuchar cosas de SYSTEM OF A DOWN, P.O.D., AVENGED SEVENFOLD, DEFTONES, ALICE IN CHAINS, entre otras tantas influencias (como los covers de las bandas que vendrían luego). Los hermanos tienen que ver con el sonido y la variedad del grupo, ya que su vivencia norteamericana fue fundamental.

Una rareza que fue bien recibida por todos fue cuando en ”Two to tango”, subieron un bandoneonista y un tecladista para acoplarse al grupo. La intro estuvo a cargo de ellos, para luego engancharse el resto. Muy original por cierto. Después, un solo de batería, con la inclusión de MARIANO y DAVID para un instrumental blusero con toques jazzeros.

Piel de gallina

El potpurrí de clásicos de la música pesada causó estragos y furor en el público presente. ”Revolution is my name” y ”Cowboys from hell”, de PANTERA, ”Master of puppets”, de METALLICA, y ”Hangar 18”, de MEGADETH, todas en versiones acortadas, generaron un pogo impresionante. Y con el plus de ”Smells like teen spirit”, de NIRVANA, el reducto de San Telmo explotó.

Como escenografía se podían ver tres telones: uno en el centro, de mayor tamaño, de color negro y dos rojos, más chicos, en cada uno de los costados (las calaveras estaban presentes en las tres, de blanco). El cierre fue con el primer corte del CD, ”Akira”. Sin dudas, su tema propio más pogueado de la noche. Sin embargo, el final llegaría con ”Arabic”, tras casi dos horas de show.

Como bien dijo su cantante en un momento del set, uno tiene que luchar por lo que le gusta y no debe rendirse ante las primeras adversidades. PORK, a través de mucha persistencia, y sobre todo con esfuerzo y talento, están alcanzando esos sueños que imaginaron en sus comienzos. Tienen un porvenir muy auspicioso, ya que si continúan en esta línea de trabajo, irán logrando las metas que se propongan.

Daniel Grosso
Foto: Fernando Fernández